05 octubre 2007

LAS APARIENCIAS ENGAÑAN....¿?








Tengo un amigo que se ha dedicado desde hace 6 meses a "sacarme a pasear". Al principio decía que era para que le presentara gente. Ahora conoce toda la gente que yo conocía y más, mucha más, y sigue "sacándome a pasear".




El fin de semana pasado salimos las 3 noches. Comenzamos comiendo el viernes en un restaurante con Alex, luego vino superpapá a buscarle para pasar el fin de semana con él, y nosotros dos nos fuimos de tiendas (me encanta ir de tiendas con él porque es todo paciencia y no le importa si compro o estoy sólo viendo). Al final del día terminamos tomando unas cañas en un restaurante al aire libre, me llamó una amiga y se sumó a las cañas. Risa tras risa. Cuando salimos de allí eran las 12 de la noche. Fuimos al bar de una amiga y de allí salimos a las 3 de la mañana, luego de que yo hubiese hablado con todo el mundo, que hubiera invitado a estar con nosotros a otra amiga, y de haber disfrutado de gente a la que hacía tiempo no veía. De allí, a la única discoteca abierta a esas horas... increíble, más gente que hacía tiempo que no veía ni hablaba con ella, bailé con todo el mundo, conversé, disfruté del ambiente, y salí un momento para llevar a una amiga a su casa, porque ella estaba triste, llovía y hacía frio. Realmente nunca me doy cuenta de que mi amigo siempre queda solo ante mi torbellino de saludos y mis letanías de conversaciones, aunque normalmente lo integro (cuando me acuerdo). Casi que tenía la discoteca patas arriba buscándome, hasta un chico que no sabía que estaba se enteró por el alboroto de que yo estaba allí y había desaparecido (fué el único sensato en llamarme al móvil, y le dije que iba enseguida, así que fue el encargado de calmar a la tropa). 10 minutos después de haber salido y unos cuantos suspiros de alivio, le confirmaron a mi amigo que no me habían secuestrado, jeje.




El sábado me prometí a mi misma que no saldría, me había acostado a las 7 de la mañana y necesitaba dormir. Me habían invitado a una fiesta, pero no tenía ni ánimos, ni ganas, y eso fue lo que le dije a la amiga que me invitó "me he quedado dormida, espero disfrutes la fiesta, te hablo mañana". Pero me quedé sorprendida, de mi misma, cuando terminé accediendo a salir de nuevo con mi amigo. "Es que sin tí no es lo mismo", "es que siento que me falta algo si no estás", "es que te necesito"... me morí de la risa y le dije, venga, deja ya la pesadez y ven a buscarme en 10 minutos... a los 5 minutos estaba tocando al timbre. Bajé y de allí directos al bar de mi amiga (la verdad es que allí siempre estoy muy cómoda, como si estuviese en casa). Jugamos una partida de dardos, a la que gané (suerte de principiante) y más saludos y amigos. Le pregunté porque me "sacaba a pasear" si al final siempre lo dejo solo, y me dijo que le encantaba verme así, que perdió su nombre hace mucho tiempo porque la gente lo saluda y le dice "y Ana?". Y que en todo caso me "usa" él a mi. Le pregunté si estaba bien, porque no es normal que alguien diga eso cuando en realidad es a mí a la que le hace el favor, porque por lo menos consigue sacarme de casa y que me relacione con la gente, además del dinero que se gasta en mí y en invitar a mis amigas (aunque mis amigos también nos invitan). Y me dijo que "las apariencias engañan". Que al principio no, pero que desde hace unos meses le encanta que le pare por la calle gente que no conoce y lo saluden diciéndole "Hola, ¿cómo estás? Y Ana?"... En fin, que para mí es difícil entender ésto. En medio de la conversación y cambio de pareceres estábamos cuando se acercó un chico, parecía mayor, pero luego nos enterábamos que tenía poco más de 30 años. Fue directo a ligar conmigo. Yo alucinaba con el descaro!!!... Intenté seguir la gracia (me parecía una broma, además de que ando desacostumbrada de esas lides)... pero hubo un momento que se puso pesado y decidí marcharme. El chico preguntaba por que te vas? y mi amigo muy pacientemente se puso a decirle que se había pasado, de una manera tan sutil que el otro no se enteraba (o no se quería enterar). Al final me hizo caso y me trajo a casa, pidiéndome disculpas por el incidente, pues si él hubiera dicho que éramos novios el otro se habría marchado, cosa que me dejó aun más perpleja (tengo que tener novio para que los pesados no se acerquen o entiendan un "no, gracias"?).




El domingo fuí a casa de Terre, pasamos un día estupendo, entre amigas, magia y encuentros que no son tan casuales. Salí de allí a las 8 para poder recoger a Alex cuando éste llegara a casa.




Cuando llegué a mi casa mi amigo estaba allí, esperando por mí. Me asusté porque nunca lo había visto tantos días seguidos. Me dijo que estaba bien, esperándome para ir a cenar, le dije que había que esperar por Alex y que además era posible que viniera una amiga a visitarme. Pues nada, con amiga y con Alex, pero que fuésemos a cenar. Alex llegó y mi amiga dijo que no podía venir, que vendría otro día (era domingo y tenía que madrugar el lunes). Fuimos a un restaurante que queda cerca de mi casa y me encontré con dos amigos. Abrazos, besos, que alegría verte!... y toda la conversación que surge, la familia, los amigos, el trabajo... que guapa estás? -gracias- así que tienes novio? -no, solo es un amigo- cuando quedamos? -en cualquier momento, llámame y hablamos- sabes que? -que?- te quiero mucho anita -graciasss, yo a ti también, besitos- Te lo digo en serio! -lo sé, gracias!- (que situación!!)... otro amigo... lo mismo, con el tequieromucho incluído.... de repente unas flores preciosas frente a mi vista... Alex y mi amigo con cara de tontos en la mesa, intentando disimular los celos los dos... uno de los del tequieromucho invitando una copa al señor que me había traido las flores, el otro amigo intentando pagarle él, a nosotros ya nos había invitado, Alex y mi amigo mudos, y yo sin poder ni articular palabra, solo atinaba a decir gracias, gracias, gracias... Alex, que hasta ese momento se estaba peleando con mi amigo para que me sacara "esos hombres" de encima y ayudarlo a recuperar a su madre, sucumbió y se unió a las gracias que yo daba, con lo que se ganó un "este niño es adorable" y el beso de una de las camareras.




Mi amigo es lo más seco de este mundo en cuanto a elogios o a comentarios bonitos, y ese día me dijo que le había dolido que me riera de él cuando me dijo la noche anterior que me necesitaba... por Dios!!!... que no cunda el pánico, le dije, ésto es producto de la Luna!!! Mañana volverás a ser feliz sabiendo que sólo somos amigos (eso es lo que realmente deseo, ser sólo su amiga), y que esas muestras de cariño que recibí esos días, especialmente el domingo, también eran producto de la Luna (y que es una pena que no sea siempre, jeje). No quedó muy convencido, pero por lo menos sonrió.




Y desde aquel momento tengo el bonito subido, la autoestima regenerada, la sonrisa más puesta, y las gracias en todo momento porque es hermoso estar rodeada de gente que tiene tan bellos sentimientos y que me emocionan con sólo una palabra.




Me gusta saber que, finalmente, ser como soy, es aceptado.




Me gusta y mucho.




¿Las apariencias engañan? ¿Quien usa a quien? Al final todos estamos en este mundo para ayudarnos unos a otros, aunque es difícil que ocurra así entre dos, mutuamente. Y mientras dura he decidido disfrutar, sin preocuparme de si lo utilizo o de si me dejo utilizar para salir.
Hoy me pidió que le comprara un medicamento y se lo llevara cuando pudiera, así lo hice y estaba él con un amigo suyo que es médico (que fue quien le recetó el medicamento), media hora después me despedí de ambos, y mi amigo preguntó ¿la Luna? y yo conteste toda llena de razón: la Luna! y me fuí... riendo.






P.D.: Tengo mucho aun que aprender sobre como tratar a los hombres, quizás así pueda aplicar lo mismo cuando aparezca uno que me guste realmente, bueno, mejor dicho, deberé dejar que me cautive, no? :)










Besos, mimos y caricias


Ya noto que estoy mucho mejor!!!
Ves mi sonrisa?