17 junio 2007

EXCURSIÓN DE FIN DE CURSO



Lo más terrible de estas excursiones de fin de curso es que los niños aun son niños, de entre 11 y 12 años. Sé que crece, que puedo hablar con él con el razonamiento de un adulto, pero para mí es mi bebé pequeñito, y estos 4 días de excursión se me hicieron eternos.

Ayer en la noche al fin llegó a casita, y yo volví a sentir la calma y la felicidad de tenerle cerca y escuchar todas sus historias y sus anécdotas.

El niño además está mejorando a su madre en cuanto a fotografía (trajo 193 fotos perfectamente enfocadas, incluso la de una rata, aggggggg).

El primer día tocó salida a las 7 de la mañana, camino al Castillo de la Mota en Medina del Campo,luego en Segovia para admirar el acueducto y comer y para finalizar fueron a La Granja a admirar las fuentes. Ducha, cena y discoteca donde bailó todo el tiempo y fue el primero en salir a la pista a derrochar encanto (se me cae la baba pensando que valió la pena obligarlo a ir a clases de baile el año pasado, pues fue la estrella incluso entre los mayores).






El Segundo día Museo de Cera, Palacio Real y Zoo...






Tercer día El Escorial (donde no le dejaron fotografiar nada) y Parque Warner....

Cuarto día Visitas a Avila y Salamanca, a las Cuevas del Aguila, al Puerto del Pico y su calzada romana....



Y de repente, a las 11:30 de la noche, para mí volvió a brillar el Sol al verle llegar.