8 de Septiembre...

El 8 de septiembre de 1966, tras 21 horas de parto inducido en una prestigiosa clínica caraqueña, la Arismendi, y ayudada por forceps, siendo casi diezmecina, ví la luz por primera vez. A las 16:20 horas el mundo escuchó mi primer llanto, y recibí los primeros besos, abrazos, cuidados y mimos.

Era una niña perfecta, tenía todo lo que una familia desea de su primera hija, y yo tenía todo el amor del mundo.


Un año y un mes después tuve el mejor regalo de cumpleaños, el nacimiento de mi hermana, a la que adoro.


Ha sido mucho lo vivido desde entonces, y agradezco todas las experiencias, porque gracias a ellas hoy estoy aquí, compartiendo con todos, amigos, amigas, conocidos y desconocidos, compañeros de vida y de camino, cada momento de mi ahora.

Sigo siendo una consentida de Dios y le agradezco cada día que pone en mi camino gente tan maravillosa como la que comparte mi vida, estas letras y estos momentos preciosos.


Quiero agradecerles tantas cosas, que no sé por donde empezar, pero especialmente quiero agradecerles la presencia, el cariño más allá de las palabras, la compañía que siento cuando leo sus comentarios, los regalos que me hacen día a día, las letras que disfruto en sus rincones, y todo, absolutamente todo, el amor que siento por vosotros, y que sigue brillando cada día con más fuerza, por todos.



Gracias por estar siempre!



Ahora a tomar un trozo de pastel y que comience la fiesta!

Por vosotros!

Salud, besos, mimos y caricias!

P.d. Os he extrañado mucho en estos días de vacaciones